All Wheel Drive, el sistema de tracción a las cuatro ruedas de Subaru
Subaru comenzó a producir vehículos con el sistema de tracción a las cuatro ruedas AWD (All Wheel Drive) en septiembre de 1972 con la introducción del Subaru Leone 4WD Estate Van, representando actualmente los modelos AWD en la marca japonesa el 98,2% de las ventas totales.
La característica más distintiva del Symmetrical AWD de Subaru es un sistema de propulsión distribuido simétricamente emparejado con un motor BOXER montado longitudinalmente y colocado en línea con el mismo.
La combinación del bajo centro de gravedad proporcionado por el motor BOXER y el equilibrio de peso, maximiza la estabilidad y tracción intrínsecas a la tracción total, ofreciendo un excelente rendimiento de conducción en una variedad de condiciones climáticas y de carreteras.
La tecnología AWD de Subaru se ha mejorado durante casi medio siglo, y continúa evolucionando también en vehículos electrificados. Muestra de ello son los modelos equipados con el denominado e-BOXER, un motor de alta respuesta que permite un control más preciso de la tracción total, lo que ofrece una mayor sensación de seguridad en superficies de carretera resbaladizas, con nieve o hielo, así como una capacidad de conducción mejorada en carreteras en mal estado.
La tracción total permanente simétrica, Symmetrical AWD, es una seña de identidad de todos los modelos de Subaru otorgando la máxima capacidad de tracción en situaciones de circulación complicadas que se traduce en una elevada seguridad en todas las circunstancias.
Según los ingenieros responsables del desarrollo de la tracción Symmetrical AWD, la distancia que se recorre hasta que se activa un sistema de tracción a las 4 ruedas no permanente circulando a 120km/h es de 10 metros. Para Subaru esa distancia puede marcar la diferencia entre tener o no tener un accidente y justifica con creces seguir empleándola en sus coches como una de sus tecnologías diferenciales de seguridad.
Añadidos al Symmetrical AWD, en la marca existen dos sistemas electrónicos que completan y mejoran la capacidad de tracción. El primero de ellos es el control activo de par (Active Torque Vectoring), y el segundo de los sistemas es el ya conocido X-Mode con dos modos de funcionamiento: Snow Dirt (nieve/grava) y Deep Snow Mud (nieve y barro).